martes, 19 de abril de 2011

Bajo la piel del agua



Ayer estuve con Trinidad Ródenas, con Manuel Romero Higes y con Antonio Castro hablamos de poetas y poesías. Cuando llegué a casa retomé un libro de Trini, Bajo la piel del agua editado por Alcazaba y leí ese poema que le da título al poemario (ver página 56):

Y ahora que te miro ya sin mancha,
ahora que me alojan tus fértiles regazos,
ahora que te escondes bajo la urdimbre
de esta barca sin remos que nos lleva,
abre conmigo al aire, amor,
el alma que me sobra.
Que se arañe de brisas,
que cruce nuestro cielo con las últimas alas,
que perciba
la levedad del pájaro en tu orilla.

Abre conmigo al aire, amor,
el alma que me sobra.
Que me busque después
bajo la piel del agua


2 comentarios:

María Blázquez dijo...

Precioso. Propio de un alma sensible, sutil y profunda como la de nuestra compañera y amiga Trinidad Ródenas.
Un abrazo para ella con toda mi admiración y otro para ti, Tino, por hacerte eco de tan bello poema.

faustino lobato dijo...

Gracias a ti María, tú sí que eres eco de todo lo que hacemos.
Un abrazote.